Carta de presentación

Estimados Sres.:

Nos complace comunicarles el cambio de imagen corporativa de nuestra empresa, que refleja la filosofía y estrategia de la misma en los próximos años. Con ello pretendemos dar una imagen acorde con nuestros nuevos productos y mejora del servicio que prestamos a nuestros clientes. Actualmente nos vemos inmersos en un proceso de innovación y desarrollo como empresa de referencia en el mercado.

El imparable crecimiento y expansión de la empresa ha propiciado este cambio, manteniendo el mismo equipo humano y técnico, así como su tecnología y patentes propias, que posibilita un mejor y más rápido servicio para nuestros clientes y una mejor adecuación a sus necesidades.

En breve procuraremos continuar informándoles acerca de las novedades y nuevos productos para alejamiento de aves. Mientras tanto quedamos a su disposición para solventarles cualquier duda que pueda surgirles y asesorarles en sus problemas de alejamiento de aves.

Juan Antonio Peña
Director Comercial

Historia de la compañía

Las palomas, junto con varios tipos de aves como cigüeñas, gaviotas y otros, son animales que tradicionalmente han sido parte integrante del paisaje de nuestras ciudades y pueblos. Si embargo, su reproducción incontrolada, unida a la gran cantidad de alimento que encuentran en las ciudades ha originado una creciente superpoblación, que ha multiplicado los problemas que originan. Estos problemas son de muy variada índole, pero principalmente están ligados a sus deyecciones, que ensucian y corroen la piedra de los edificios emblemáticos y monumentos, produciendo una progresiva degradación en las fachadas, cornisas, tejados y elementos arquitectónicos en los que reposan o anidan. Son también importantes los problemas ligados a la suciedad que se acumula en azoteas, balcones y terrazas, a los ruidos molestos que causan, y a los problemas de salud que pueden llegar a transmitir a la población.

Existen en el mercado multitud de sistemas, productos e instalaciones que intentan solventar este problema. Algunos de ellos se basan en el intento de controlar la población de palomas, como por ejemplo su captura con redes, trampas o rapaces o la utilización de alimentos envenenados, pero este tipo de técnicas han demostrado muy poca efectividad debido a la alta capacidad reproductora de las aves, y a la mala impresión que causan en la opinión pública y en las organizaciones ecologistas y de protección de los animales.

Otros sistemas intentan utilizar elementos químicos, como por ejemplo aglutinantes, repelentes, pastas viscosas, resbalantes, etc… que impidan o molesten a las aves para que no se posen, pero estos elementos se ha mostrado en muchos casos que llegan a producir daños en los propios materiales constructivos del edificio, que por su naturaleza porosa se impregnan con ellos, alterando su color o sus propiedades físicas, produciéndose importantes deterioros, de mayor relevancia en caso de edificios emblemáticos.

En otros casos se intenta proteger las partes en las que se suelen acomodar las aves mediante elementos mecánicamente disuasorios, como por ejemplo pinchos, alambres tensados, alambradas de espino, mallas de protección o redes que impidan su acceso al tejado o a las fachadas, pero este tipo de soluciones, a pesar de una cierta eficacia si están bien aplicados, tienen el inconveniente del enorme impacto visual que provocan, especialmente cuando se utiliza en fachadas, cornisas o conjuntos esculturales, lo cual hace que no sea viable su aplicación en monumentos, edificios emblemáticos, o del patrimonio histórico por la gran degradación visual que comportarían.

Conscientes de esta problemática, JUAN ANTONIO PEÑA, comenzó a aplicar hace 14 años el patentado Sistema Electrostático para el Alejamiento de Aves, que ha ido evolucionando y perfeccionándose continuamente hasta llega en la actualidad a ser el procedimiento más eficaz y discreto para mantener un edificio protegido de los daños originados por las aves. Esto nos permite garantizar con absoluta seguridad que las aves serán alejadas totalmente y de manera definitiva de todas las partes Arquitectónicas tratadas con él, consiguiendo preservar nuestros monumentos de una de sus más nocivas y antiestéticas influencias, consiguiendo a su vez que la inversión realizada al restaurarlos sea efectiva y ayude a conservar su belleza a pesar del paso del tiempo.

Con este Sistema Electrostático para el Alejamiento de Aves se encuentran protegidas numerosas e importantes obras arquitectónicas en Europa y en España, tal y como se recoge en el listado de obras.

Debemos resaltar que el Sistema Electrostático para el Alejamiento de Aves se adapta perfectamente y protege todo tipo de estatuas, filigranas, columnas, volutas y demás elementos arquitectónicos propios de cualquier estilo, gracias a la importante y especializada labor técnica a la par que artística que desarrollan nuestros técnicos colocando el circuito de protección en cualquier parte del edificio susceptible de ser utilizada por las aves para posarse, por muy inaccesible y complicado que sea el elemento arquitectónico a proteger.

Esta especialización, junto con la amplia y dilatada experiencia en técnicas de trabajo sobre elementos arquitectónicos históricos, y el profundo y detallado estudio previo a la instalación, permite lograr una completa efectividad, evitando que el ojo humano pueda percibir a simple vista los elementos de la instalación o sus cableados. De esta forma la instalación queda perfectamente integrada en el edificio sin causar ningún tipo de injerencia visual que moleste o estropee en su contemplación, manteniendo un riguroso respeto a la estética del Edificio y de cada uno de sus elementos arquitectónicos.

La instalación está constituida con conductores de acero inoxidable, elementos aislantes de alta resistencia a las acciones corrosivas de los agentes atmosféricos, con cableados especiales de doble aislamiento, y fijaciones mecánicas o adhesivas de alta resistencia, que permiten garantizar una casi indefinida vida útil de la instalación.